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Los Mabinogion. Mitos de soberanía del País de Gales

Las cuatro ramas del "Mabinogi"

 



















Pwyll y Pryderi
Las cuatro ramas del Mabinogi del país de Gales contienen relatos relativos a tres familias, que vemos aparecer al comienzo de la primera, la segunda y la cuarta rama (la tercera se abre con los acontecimientos que reúnen a personajes ya presentes en una de las dos primeras ramas, si no en las dos, pero en lo esencial no es sino una prolongación de la primera; estas dos ramas tratan de los señores de Dyfed, en el sudoeste de Gales). La primera palabra de la primera rama es el nombre de Pwyll ("lentitud prudente, o sabia"), príncipe (pendeuic) y señor de los siete cantones ("cantreds") de Dyfed. Un nombre común irlandés está emparentado con el suyo, pero con un prefijo despreciativo, doichlech, "siervo". A ello hemos de añadir que el dios celta Sucellus, cuyo nombre muy probablemente también está emparentado con el suyo, si bien esta vez lleva un prefijo favorable, es considerado habitualmente un dispensador de riqueza y de prosperidad: "sus fieles son sobre todo gente común" (Jan de Vries). La segunda rama del Mabinogi se abre con el nombre de Bendigeidfran hijo de Llŷr, rey de la isla de los poderosos. El primer elemento de su nombre es un adjetivo que significa "bendito" y que en ocasiones falta. El nombre como tal es Brân. El substantivo brân designa de ordinario un cuervo, pero la forma compuesta cynfran designa también a un guerrero o (como ocurre con el irlandés bran) un caudillo. Brân recibe la corona de Londres, pero los nombres de lugar lo asocian con Powys, en el nordeste de Gales. La cuarta rama se abre con el nombre de Math hijo de Mathonwy, el soberano-mago de Gwynedd en la Gales del noroeste. En la tradición irlandesa figuran otros personajes con el mismo nombre, como Mathu - que aparece citado junto a Nuadu y Goibniu como uno de los tres "profetas" de los paganos - y Matha, el druida que se opone a san Patricio. Estos tres nombres iniciales, Pwyll, Brân y Math, indican la naturaleza respectiva de las tres familias.
Pryderi ("Preocupación"), hijo de Pwyll, es nombrado el primero entre los siete supervivientes del ejército de Brân en la segunda rama. En la tercera otorga a su madre, Rhiannon, en matrimonio a Manawydan, el hermano de Brân, y en la cuarta es vencido y muere a manos de Gwydios, sobrino de Math. De modo que la familia del sur forma un lazo entre las dos del norte, del mismo modo que el pueblo de Nemed, en la tradición irlandesa, es el antepasado tanto de los Fir Bolg como de los Tuatha Dé Danann.
A lo largo de estos relatos, cuando los señores de Dyfed visitan su tierra constatan que jamás han visto un país más agradable para vivir, más conveniente para la caza, o más rico en miel o en pescado. Las leyes galesas precisaban que únicamente los plebeyos habían de proveer a sus señores de miel y pescado. Casi todas las cacerías que aparecen en los Mabinogion tienen lugar en la parte sur del País de Gales, de la misma manera que la mayoría de aventuras de los cazadores fenianos tienen como escenario la Irlanda del sur. Algo antes en el Mabinogi, cuando Manawydan siembra el trigo, éste crece "el mejor del mundo"; "nadie había visto un trigo mejor", lo que recuerda la observación relativa a los hombres libres del dominio de Nemed, "su grano era grano rico". Manawydan hijo de Llŷr es, sin duda alguna, el Manannán mac Lir de la tradición irlandesa, del que se dice que era el dios del mar tanto para los irlandeses como para los galeses. Del mismo modo, entre los griegos Poseidón era el dios de los granjeros y también el del mar. Las ramas "meridionales" del Mabinogi parecen tratar tanto de los plebeyos como de los hombres libres. Pwyll y Pryderi tienen algo especial respecto a los demás soberanos mencionados en el Mabigoni: su dominio se cuenta en cantrefi o cantreds (cantref: can, cien, y tref, habitación), lo que tan sólo vuelve a aparecer en el caso del joven Lleu, al que se le concede el poder sobre un cantred. También llama la atención en su historia la excepcional frecuencia de las palabras cyfoeth ("dominio", "riqueza") y cyfanned ("habitación", "trato social", por derivación de anned, "morada", "lugar de residencia"). Podríamos señalar que 1) el vísh del Rg Veda, principio de la tercera casta, es definido como "campesino", "hábitat organizado", y en plural, "conjunto del pueblo en sus agrupaciones sociales y locales" (G. Dumézil); 2) en la más antigua sociedad irlandesa, el hospitalario (que no pertenecía a la clase noble) era descrito como cétach (hombre "de centenas"), y su riqueza se calculaba en "centenas"; 3) en la tradición romana fue Servius, cuyo nombre deriva de servus, un rey estrechamente ligado a los servi y a los libertos, quien reorganizó la asamblea política sobre la base de la centuria.
En la primera rama del Mabigoni, Pwyll ofende a Arawn, rey de Annwfn (¿"mundo subterráneo" o "mundo grande"?) porque no reconoce el derecho que éste tiene sobre el ciervo abatido por sus perros. Se le reprocha su anwybot y su ansyberwyt, es decir, su descortesía (palabras que denotan de hecho, por medio de sus componentes, la falta de conocimiento y la falta de nobleza); pero no parece darse cuenta, y para ganarse la amistad de Arawn (y evitar de paso las palabras infamantes con las que es amenazado), se aviene a ocupar su lugar por espacio de un año, con el fin de enfrentarse al enemigo encontrado de Arawn, Hafgan, quien podía ser fácilmente derrotado de un solo golpe, pero nunca si era preciso un segundo. Arawn efectúa el intercambio de las apariencias físicas, y se le pide a Pwyll que aprenda las maneras de la corte de Arawn, que era maravillosa por la perfección aristocrática y la cortesía de sus costumbres. Éste gustaba de la compañía y de la conversación de la reina, la mujer más graciosa que había visto nunca, y por la noche compartía castamente su lecho. Más tarde derrota a Hafgan ("blancura de verano"), unificando así Annwfn en un solo reino. Cuando regresa a Dyfed comprueba que sus súbditos, en ese año pasado, han encontrado a su príncipe más cortés, amable, generoso y justo que nunca, y que se espera de él que mantenga esa excelencia. Annwfn y Dyfed se hallan a partir de entonces unidos también por la amistad de sus dos soberanos y sus generosos intercambios de presentes, y Pwyll será conocido de ahí en adelante como el jefe de Annwfn y no como el Príncipe de Dyfed. En un poema, Is-dwfn ("mundo subterráneo") parece que se hace referencia a Dyfed, exactamente como la casa de Donn (isla de los muertos) aparece en relación a la provincia de Mumu (Munster) o su dinastía.
A continuación tienen lugar tres series de acontecimientos, y cada una de ellas comienza sobre la mágica colina-trono que se encuentra en las proximidades de la corte de Arberth en Dyfed. La primera maravilla que presencia Pwyll es la aparición de RHiannon: después de que los caballos más veloces no consigan dar alcance a su caballo blanco, que sin embargo va al trote, ella revela que ha rechazado casarse con el pretendiente al que la habían destinado, por amor a Pwyll. Durante las fiestas de su boda un año después, Pwyll da prueba de una gran negligencia infantil a la hora de salvaguardar lo que le pertenece, y se ve obligado a ceder a su esposa al pretendiente rechazado, Gwawl ("luz"). Rhiannon le llena de reproches, pero le confía un saco de provisiones mágicas que le permite, durante las bodas de Gwawl, capturar a su rival, mofarse de él llamándole "tejón en el saco" y recobrar a su esposa (de un modo similar, el rival del rey de Mumu (Munster) al trono, un rival vencido, es llamado el "tejón de Mumu"). Tras una larga espera por el nacimiento de un hijo, el niño desaparece, lo que guarda relación con la pérdida anual, cada primero de mayo, del potro que regularmente le nace entonces a la yegua de Teyrnon, el señor de un territorio del sudeste de Gales. Teyrnon consigue cortarle la garra al ladrón - ¿un tejón acaso? - y cuando encuentra al hijo de Rhiannon en su puerta, él y su mujer lo crían como si fuese su propio hijo y se lo llevan más tarde a sus padres. Teyrnon ("señor") es considerado "el mejor hombre sobre la tierra". Notemos que en los relatos galeses "el mejor hombre", y también "hombre bueno" son expresiones reservadas para los hombres libres, gentilhombres en el seno del Tercer Estado, del mismo modo que "los mejores caballos", etc., son los atributos de sus posesiones. Con frecuencia se expresa la esperanza de que Pryderi ("preocupación") se revele como un verdadero gentilhombre. Muchos años después muere Pwyll.
En la tercera rama, Pryderi, que ha conquistado siete "cantreds" más, confía Dyfed a Manawydan cuando este último toma a Rhiannon por esposa. Los dos señores y sus esposas visitan la colina-trono, pero una transformación mágica tiene lugar entonces. Ningún signo, ningún rastro de población (cyfanned) o de riqueza son visibles en el país desierto. Más tarde, son obligados a entrar en competición con los artesanos del cuero en Lloegr (Inglaterra), "villanos y canallas". El impetuoso Pryderi es retenido por el paciente Manawydan, pero al final se deja encerrar de un modo estúpido en una fortaleza mágica en la que su madre también se halla cautiva. Manawydan siembra trigo y se las arregla para capturar uno de los innumerables ratones que le privan de su cosecha. Se dirige hacia la colina-trono, se dispone a colgar al "ladrón" y, al negarse obstinadamente a soltarlo, obliga a su enemigo, al mago Llwyd ("Gris"), el vengador de Gwawl, a descubrirse, a restablecer la vida de su tierra, con sus riquezas y sus habitantes, y sus príncipes como eran antes, y a prometer que Dyfed ya no será nunca más objeto de tales encantamientos. Después de esto, Pryderi aparece como señor de un tercer lote de siete "cantreds", que incluyen el territorio de Teyrnon, "el mejor hombre del mundo".
Notemos 1) que los gobernantes de Dyfed no poseen ningún poder mágico; 2) que Pwyll y Pryderi son gemelos por nombre, apariencia y conducta - una conducta que al principio traiciona a su nombre -. Su relación recuerda la de Njördr y de Freyr, el padre y el hijo, dioses nórdicos de la "tercera función". Y quizá también la de Elatha y su hijo Bres, la de Laigne Lethan-Glas y su hijo Liath, en la tradición irlandesa. 3) En lo que respecta a los destinos de Pwyll y de Pryderi, ambos aparecen ligados de manera recurrente a los caballos. Podemos razonablemente compararlos con los Aśvin y los Dióscuros, y Henri Hubert y otros estudiosos han visto en la figura de Rhiannon a la diosa Epona. 4) Las cacerías, los festines, el interés por las artes del cuero y el cultivo del trigo que aparecen en los relatos, así como el cuidado con que Pryderi se ocupa de los cerdos de Annwfn (en las Tríadas él es el porquerizo de Pendaran Dyfed) y el canto de los pájaros mágicos de Rhiannon (en la segunda rama), que es comparable a la música de la Irlanda meridional, todo ello confirma el carácter "tercera función" de estos príncipes del sur. Sus adversarios presentan características de una u otra de las tres funciones: Hafgan, el combatiente infatigable, Gwawl, el "tejón" que intenta robar a la vez la esposa y la fiesta, y Llwyd, el mago. Los tres, que además están relacionados por sus nombres, son derrotados por la vigilancia nocturna y el control; por un solo golpe; por la comida precisa para llenar un pequeño saco; y por aquello que podría darse a cambio de un ratón a punto de ser colgado. Aparte de esto, Pryderi se convierte en el señor de siete "cantreds" por la gracia de su nacimiento; gana otros siete por conquista, y los siete últimos parecen caerle del cielo apenas resulta derrotado el mago. Probablemente los mismos tres aspectos resultan perceptibles también en los escudos, las sillas y los calzados fabricados por Manawydan y Pryderi, así como en los escudos, caballos y lebreles que este último acepta de Gwydion.
El Mabinogi comienza en la Gales del sudoeste con el relato de las deficiencias de Pwyll y de Pryderi en cuestiones de cortesía y de moderación que les permitirán realizar su destino aristocrático; en cierto momento se centra en la figura de Teyrnon "el mejor hombre del mundo", esta vez en el sudeste, más tarde pasa a las familias del norte, empezando por la del rey-guerrero Brân, el destructor y el protector conmemorado en los nombres de lugar del nordeste, y continuando con la de Dôn en el noroeste, magos esta vez, cuya ciencia tanto sirve para la malediciencia como para la desmesura. Concluye con la ascensión a la soberanía de Lleu, cuyo nombre, "luz" - tal y como lo entiende el narrador, independientemente de cuál pueda ser su origen -, es muy parecido al de los misteriosos adversarios del atolondrado Pwyll y el imprudente Pryderi: Hafgan, Gwawl, Llwyd.

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